miércoles, 21 de enero de 2009

tetas


Desde hace varios días que observo atónita la metamorfosis que ha sufrido mi cuerpo en este periodo médicamente conocido como “puerperio”.
Es una mutación no menor entrar con una panza enorme a una clínica, ver en el quirófano y sin querer a través de los focos gigantes, como te meten una sonda y te faenan tu guata. No. No es menor salir 3 días después caminando con una guagua en brazos y cero guata.

Es chocante, sobre todo cuando miras y miras a tu guagua y no te encuentras absolutamente ningún parecido con ella y es mas, es el vivo retrato de su padre.

Sin embargo, a pesar de todo lo horroroso que esto pueda parecer, hay un punto en el que quiero detenerme.
Hay una cosa, una mutación que tiene que ver con nuestra esencia netamente femenina. Una “cualidad” física que antes no soñé tener y que hoy aprendo a disfrutar aunque me desconozca.
Me han crecido unas pechugas impresionantes! O sea, Márlen Olivári es, pero, una alpargata al lado mío y Adriana Barrientos me hace heavy la competencia.
Me acuerdo cuando tenía 15 y lo único que quería en la vida era tener más pechugas y menos (harto menos) poto.
9 años después y con una hija que duerme a mi lado, he logrado mi sueño:
El poto se me callo ipso facto al acto de parir y en 3 días de nacida Colombina, yo ya me desconocía ante el espejo. O sea, no tenia claro si era gracias a la anestesia que veía todo mas grande y desproporcionado o si el calor y el dolor me tenían atontada.
El caso es, que de repente ese espejismo se convirtió en un dolor atroz en las pechugas (dolor desconocido para mi por lo demás) y gracias a una matrona entendí que debía sacarme leche inmediatamente si quería evitar una mastitis. (moya idea de qué era eso hasta entonces).

Y de ahí en más, el resto es historia mas o menos conocida.
Me pongo escotes…o mas bien, la misma ropa de siempre -porque no compré maternal ni post parto- pero ahora con un escote y un peso hacia adelante que en principio me hacia doler el cuello.

Es chistoso, porque aunque aquí solo me vean las vacas, siento como que de a poco recupero mi “sex appeal”…si es que alguna vez lo tuve, claro.
Echaba de menos ponerme “ropa flaca”, echaba de menos sentir que se me caen los pantalones…extrañaba mi cintura un poco..
Y aunque todavía no es mi cuerpo definitivo (cabros, la ley de gravedad afecta, creanme) me siento mas que contenta.
Las pechugas soñadas, el peso ideal, menos pelo y por ende menos depilaciones veraniegas…
Si…
Esto es lo lindo del post parto.
Esto y sentirse una mamá chora, tal vez hasta un poco cool, paseándose con su hija de quince días en coche por todas partes y disfrutando que la miren porque es linda.
Si..
Es preciosa mi palomita.
Y yo, para qué mas chocha

=)

3 comentarios:

Tronkhos C. dijo...

Amor, te adoro!
pucha que inda la foto!
que hjeavy lo de los cambios corporales
te adoro
gracias por acordarse de mi cumple

► golondrina dijo...

sabis que la pega me chupa todo









el tiempo
y ya que salí y soy cesante again
puedo disfrutar de tus escritos
que ahora tienen como otra inclinación ..!!!

al final quiero verte
de welta de la playa
pq me voy en unas horas más
No tardo..

quiero traerte algo jipi medio volao de la playa..
tranqui que no es un cuete
no quiero que la colombi abra su mente aún ..

ajajajajaja!!

te amo..
Porsiaca.. mandé el currículum de feli a un nuevo proyecto de la cato.. se busca sociologos como locos.. no aseguro naa
lo bueno que son proyectos cortos y pagan bien..

veamos que sale

Te amo marbiri
te amo colombi
te amo feli
te amo neki
te amo sebi

ajajajjaa
ahhree

Ba dijo...

puta la weona..
te fuiste a la playa

y traeme algo para volar porfa..temgo leche de sobra y guardada como 2 lts..asi que..estoy
LIBREEEEEEEEEEE
LIBRE PARA VOLAR

vuelve de tu irrealidad playera pequeño burguesa jipi de mala muerte


vuelve

seba vuelve
neko,aparece

los amooooooooo